Molly Brown, siempre a flote (1964)

 


Título original: The Unsinkable Molly Brown

País: Estados Unidos

Director: Charles Walters

Guion: Helen Deutsch (Obra: Richard Morris)

Música: Robert Armbruster, Jack Elliott, Calvin Jackson, Leo Arnaud, Jack Hayes, Leo Shuken

Fotografía: Daniel L. Fapp

Productora: Metro-Goldwyn-Mayer (MGM)

Intérpretes: Debbie Reynolds, Harve Presnell, Ed Begley, Jack Kruschen, Hermione Baddeley, Vassili Lambrinos, Fred Essler, Harvey Lembeck, Lauren Gilbert

Año de producción: 1964

Duración: 02:15:35

Género: Musical, Comedia, Romance

 


Sinopsis:

Majestuosas montañas sirven de fondo a un río impetuoso por el que desciende, zarandeado por la fuerza de las aguas, un bote sin ocupantes… ¿Sin ocupantes? Un momento, parece que algo se mueve en su interior, pero… ¡fijaos bien! No, no es un bote. ¡No puede ser! ¡Es una cuna de bebé! Y lo que se mueve en su interior es… ¡exacto! Ni más ni menos que un bebé.

Molly Brown (Debbie Reynolds) acaba de sobrevivir a la primera catástrofe de las muchas a las que deberá enfrentarse a lo largo de su vida: una inundación.

Dieciséis años más tarde, Molly abandona el hogar donde ha crecido y se lanza a conquistar el mundo dispuesta a salir de la pobreza. Para conseguirlo, su único objetivo es encontrar un marido millonario, pero se enamora de Johnny (J.J.) Brown (Harve Presnell), tan pobre como ella.

 

Versión: Dual (subts. integrados -españoles, ingleses y forzados españoles-)

Formato: .mkv

Calidad: DVDRip

Tamaño: 2.68 GB

Molly Brown, siempre a flote

 

Curiosidades varias, algunos cotilleos (de vez en cuando) y un poco de rollo de mi cosecha

“Molly Brown, siempre a flote” obtuvo seis candidaturas a los Óscar, aunque no consiguió ninguno de los premios:

--Mejor actriz protagonista (Debbie Reynolds).

--Mejor dirección artística (George W. Davis, E. Preston Ames, Henry Grace, Hugh Hunt)

--Mejor fotografía en color (Daniel L. Fapp)

--Mejor diseño de vestuario (Morton Haack)

--Mejor música (Robert Armbruster, Jack Elliott, Calvin Jackson, Leo Arnaud, Jack Hayes, Leo Shuken)

--Mejor sonido (Franklin Milton)

Harve Presnell consiguió el Globo de Oro al mejor actor revelación, Debbie Reynolds fue candidata al Globo de Oro como mejor actriz en comedia o musical y en la misma categoría también la película optó al Globo de Oro.

Según la propia Debbie Reynolds esta era su película favorita, sin embargo consiguió el papel después de haberlo rechazado Shirley MacLaine.


El musical en que se basa la película es original de Richard Morris, autor del libreto, y Meredith Willson, compositor y letrista de las canciones; se  estrenó en Broadway,  en  el Winter Garden Theater, a primeros de noviembre de 1960 y alcanzó las 532 representaciones. Harve Presnell fue el único de todo el reparto que repitió papel en la película.


En la vida real a la protagonista, cuyo verdadero nombre era Margaret, nadie la conocía por “Molly”; la llamaban Maggie o Sra. Brown, pero Meredith Willson creyó oportuno cambiar Maggie por Molly por considerar que en las canciones Molly sonaba mejor que Maggie.

El episodio en el que J.J. Brown quema accidentalmente todos los ahorros que Molly ha escondido en la estufa, parece que fue una invención de un periodista después de que Molly se convirtió en una celebridad tras haber sobrevivido al naufragio del Titanic. Cuando su hija le preguntó la razón por la cual nunca lo desmintió, Molly le respondió que prefería que escribieran cualquier cosa sobre ella a que no escribieran nada.

Hay, sin embargo, otra versión de la historia ligeramente diferente y ésta sí atribuida a la propia Molly Brown. Según parece nuestra protagonista escondió sus ahorros, y su marido, sin saberlo, encendió la estufa un día especialmente frío. Afortunadamente, según la misma Molly, no se trataba de papel moneda sino de monedas de oro y plata (los mineros preferían las monedas a los billetes) que, por la acción del calor, se fundieron y formaron un solo cuerpo con el hierro de la estufa. Para recuperar el dinero sólo hubo que romper la estufa y fundir los trozos separándose así el hierro, la plata y el oro.

Además, claro, de por Debbie Reynolds, Molly Brown fue interpretada por diversas actrices en diferentes películas, series de televisión o incluso obras de teatro:

--“El hundimiento del Titanic” (Titanic), dirigida por Jean Negulesco en 1953. El personaje interpretado por Thelma Ritter estaba claramente inspirado en Margaret Brown, aunque en la película se cambió su nombre por el de Maude Young y en vez de ser propietaria de una fortuna en acciones de una compañía minera de Colorado, se “trasladó” la compañía a Montana.

--En la segunda temporada de la serie “Telephone Time”, en el episodio 22 emitido en febrero de 1957, titulado “La insumergible Molly Brown” (The Unsinkable Molly Brown), Molly Brown era interpretada por Cloris Leachman.

-- “La última noche del Titanic” (A Night to Remember), dirigida por Roy Ward Baker en 1958, Tucker McGuire interpretaba a la Sra. Margaret “Molly” Brown. En esta película, en un papel muy, muy secundario (tanto que ni siquiera salía su nombre en los créditos) también aparecía Sean Connery.

--“The Unsinkable Molly Brown”, comedia musical estrenada en Broadway en 1960. La protagonista era interpretada por Tammy Grimes, que ganó el Tony correspondiente a la mejor intérprete femenina de una comedia musical.

--De nuevo Cloris Leachman, en 1979, y de nuevo en televisión, aunque en este caso no era un episodio de una serie sino una película rodada especialmente para televisión (una TV Movie, vaya…); se titulaba “S.O.S. Titanic” y en el reparto también estaban, entre muchos otros, David Janssen, Susan Saint James, Ian Holm y Helen Mirren.

--De nuevo en televisión, en una serie de ciencia ficción titulada “Voyagers!”, que se emitió entre los años 1982 y 1983 (se emitió en España con el título de “Viajeros”); en la segunda temporada, el episodio 15 titulado “Viajeros del Titanic” también contaba entre sus personajes con la “insumergible” Molly que aquí era interpretada por Fionnula Flanagan (la misteriosa vieja sirvienta de Nicole Kidman en “Los otros”, de Alejandro Amenábar).

--En 1996, un año antes que James Cameron, y con el mismo título, “Titanic”, se realizó una miniserie para televisión con un  reparto que incluía a George C. Scott,  Catherine Zeta-Jones, Eva Marie Saint, Tim Curry y Peter Gallagher; Marilu Henner interpretaba a Molly Brown.

--¡Tachán, tachán! “Titanic”, dirigida por James Cameron en 1997, también contaba con Molly entre sus múltiples personajes, y Molly con una nueva intérprete de categoría: Kathy Bates.

Probablemente haya más, pero no me resisto a hacer constar la que es, por ahora, última intérprete de nuestra heroína. Se trata de la actriz inglesa Rosalind Blessed, que le da vida en la obra teatral “Iceberg Right Ahead!” (¡Iceberg justo delante!, podría traducirse) original de Chris Burgess, estrenada en Londres, en el teatro Gatehouse en marzo del pasado año 2012.

Margaret Tobin Brown

Margaret Tobin Brown, nacida el 18 de julio de 1867 en Hannibal, Missouri (USA) y fallecida el 26 de octubre de 1932 en Nueva York, fue una conocida filántropa y activista por los derechos de los ciudadanos.

Hija del matrimonio formado por John Tobin y Joanna Collins, emigrantes irlandeses de condición humilde (eufemismo que, en este caso, sirve para disimular una extrema pobreza). El matrimonio tuvo cuatro hijos: Margaret, Daniel, William y Helen, y cada uno de los cónyuges aportó a la familia una hija fruto de un matrimonio anterior: Catherine Bridget Tobin, hija de un primer matrimonio de John, y Mary Ann Collins, hija de Joanna y su primer marido. John y Joanna habían enviudado cuando aún eran muy jóvenes y a su llegada a América se integraron en una comunidad de católicos irlandeses de ideas progresistas, mentalidad y creencias que infundieron en todos sus hijos y que Margaret tuvo cumplidas ocasiones de poner en práctica a lo largo de toda su vida.

Margaret estudió en una escuela dirigida por su tía Mary O’Leary, pero a los trece años, para poder ayudar a su familia, se puso a trabajar en una fábrica de la compañía tabaquera Tobacco Company Garth. Fue allí donde por primera vez tomó conciencia de la explotación a que se sometía a los trabajadores, sujetos a largas jornadas de trabajo en condiciones penosas y con salarios muy bajos.

Con dieciocho años, en 1885, junto con su hermano Daniel, se trasladó a Leadville, Colorado, una ciudad minera donde vivía su hermana Mary Ann Collins, casada con un herrero. Daniel encontró trabajo en la mina y Margaret en los almacenes Daniels & Fisher Co, en el departamento de alfombras y cortinas.

Durante el verano de 1886 conoció a James Joseph Brown, catorce años mayor que ella y a quien todos llamaban simplemente J.J., con quien contrajo matrimonio en octubre de ese mismo año. En agosto de 1887, en Hannibal nació su primer hijo, Lawrence Palmer y dos años más tarde, en julio de 1889, nació su hija Catherine Ellen, en Leadville.

J.J. Brown, también hijo de inmigrantes irlandeses, tan pobres como la familia Tobin, trabajaba de aprendiz en la mina, y distaba mucho de ser el ansiado millonario que Margaret tenía en mente cuando abandonó la casa de sus padres. Pero Margaret no lo piensa dos veces (bueno, sí, tal como ella misma lo cuenta, sí se lo piensa dos, o quizá hasta tres veces) y se casa con J.J. por amor.

Siempre quise un hombre rico, pero me enamoré de Jim Brown. Buscaba un modo de liberar a mis padres de su situación y había decidido permanecer soltera hasta encontrar al hombre que les pudiese dar todo aquello de lo que siempre carecieron. Jim era tan pobre como nosotros y no había tenido demasiada suerte en la vida. Luché conmigo misma. Me había enamorado de Jim, pero él era pobre. Finalmente decidí que estaría mejor con un pobre al que amase que con un rico del que sólo me atrajese su dinero.

Y me casé con Jim Brown.


Al principio los recién casados vivieron en Stumptown, pequeño pueblo cercano a Leadville cuyos únicos habitantes eran mineros con sus familias y que contaba con una pequeña comunidad irlandesa. El pueblo había sido fundado en 1876 y las familias se afincaron en él debido a la proximidad de las minas, pero las condiciones de vida eran muy precarias especialmente durante el invierno cuando la nieve, abundante en Colorado, dejaba incomunicados ambos pueblos durante días.

En 1891 J.J. comenzó a trabajar para la Ibex Company, recientemente creada, como supervisor de varios pozos mineros.

Los numerosos accidentes en las minas hacen que J.J. comience a darle vueltas a una posible solución y acaba ideando un sistema por el que, mediante maderas y fardos que cubren los techos y las paredes de la galería, se evitan los frecuentes hundimientos y, al tiempo que se salvan vidas, se consigue que los mineros puedan trabajar a más profundidad y más seguros. Los dueños de la compañía se hacen cada vez más ricos (ya veis que, en este sentido, todo sigue igual) y, como recompensa, ceden a J.J. el doce por ciento de las acciones de la compañía y le dan un puesto en el consejo de administración.

Ya tenemos a “Molly” en el lugar que siempre ha deseado. Con el cambio de suerte y la súbita fortuna la familia se instala entre la alta sociedad de Denver que, sin embargo, se resiste a aceptarles debido a sus humildes orígenes. No obstante, Margaret, comprometida y militante, se consagra al servicio de los demás, especialmente a la defensa de los derechos de las mujeres, de los niños y de los mineros de Colorado.

Al regreso de un viaje a Chicago, donde visitaron la Exposición Universal, J.J. adquiere una mansión en Denver donde, además del matrimonio y sus dos hijos se instalan también los padres de Margaret y de James y las tres hijas de Daniel, el hermano de Margaret viudo desde hace algunos años. Con el tiempo esta casa pasó a ser el “Museo de Molly Brown”, que se conserva y puede visitarse en la actualidad.


El matrimonio aprovecha también para viajar y conocer gentes y países y en 1902 emprende una vuelta al mundo visitando Irlanda, su país de origen, Francia, Rusia, Japón y la India.

Sin embargo, tras veintitrés años de matrimonio, en 1909, la pareja, de común acuerdo, se separa, aunque no llegan a divorciarse y continúan manteniendo buenas relaciones hasta el fallecimiento de James en 1922.

Más independiente que nunca, tras la separación Margaret sigue viajando y se instala durante largas temporadas en Francia. Se encuentra en París cuando recibe noticias de que su nieto Lawrence Palmer Jr. Se encuentra enfermo y decide regresar lo antes posible a los Estados Unidos, para lo cual adquiere pasaje para hacer la travesía en el primer barco disponible, que resulta ser el Titanic.


Ella se encuentra entre los supervivientes y ello, junto a la justa fama de mujer comprometida con las causas de los más desfavorecidos le hace ganar notoriedad y respeto en su país donde, durante unos dos años, participa en cada acción que considera justa, como cuando a solicitud de las mujeres de los mineros de Ludlow se une a la huelga que estos llevan a cabo. Se involucra también activamente en la lucha por el derecho de las mujeres al voto hasta que, tras el estallido de la Primera Guerra Mundial, se traslada a Francia donde, junto a un grupo de mujeres americanas organiza la asistencia a los soldados heridos, actividad que se ve recompensada con la concesión de la Legión de Honor.


Cuando sus actividades se lo permiten, en tiempos de paz, cultiva otra de sus grandes aficiones: el teatro. Es una gran admiradora de Sarah Bernhardt y se atreve incluso a interpretar, con éxito, tanto en París como en Nueva York, alguno de los personajes creados por la mítica actriz.

Sin apenas contacto con sus hijos a causa de problemas surgidos respecto al reparto de la herencia de su esposo, Margaret Brown murió sola, mientras dormía, en el Hotel Barbizon de Nueva York, el 26 de octubre de 1932. La autopsia descubrió la presencia de un gran tumor cerebral. Su cuerpo fue enterrado en el cementerio “The Holly Rood” (La Santa Cruz) del condado de Nassau, en el estado de Nueva York, junto a los restos de su esposo James Joseph Brown.

Cien años después del naufragio del Titanic, Margaret Brown es conocida casi exclusivamente como “la insumergible Molly Brown” (“the unsinkable Molly Brown”), aunque nunca durante su vida se la conoció por dicho sobrenombre; ello se debe sobre todo al éxito alcanzado tanto por la comedia musical como por la película basada en la misma que, en última instancia, también es la causa de este larguísimo (interminable pensaréis algunos) rollo que os he hecho soportar.

 

La casa de Denver, comprada por el matrimonio en 1894, se ha convertido en un museo dedicado a la memoria de Margaret “Molly” Brown.

 

Una segunda casa, más espaciosa, que fue bautizada por Margaret como “Avoca House”  (*) sirvió de residencia veraniega de la familia. También esta puede visitarse como museo.

 (*) Construida en 1897 por J.J. Brown en un lugar donde abundaba el agua, por cuyo motivo su esposa bautizó la casa con el nombre de “Avoca House” en homenaje a Thomas Moore, poeta irlandés (porfa, porfa, no confundir con Sir Thomas Moore, también conocido como Santo Tomás Moro con quien, os lo aseguro, no tengo ningún vínculo de parentesco) y más concretamente a uno de sus poemas (el preferido por Molly) titulado “The Meeting of the Waters” (**) (“Donde se juntan las aguas” podría traducirse aproximadamente).

En esta segunda residencia, Molly y J.J. se refugiaban del ajetreo de Denver y encontraban paz y tranquilidad lejos del mundanal ruido. Todo muy bucólico, como veis.

Pues bien, desde enero de 1990,  “Avoca House” (que exteriormente recuerda bastante a la casa situada en el número 1340 de la Avenida de Pennsylvania, primer domicilio de los Brown) está incluida en el Registro Nacional de Lugares Históricos y, como os digo un poco más arriba, puede visitarse como museo.

 

 

Este es el lugar “donde se juntan las aguas”

(**) En el precioso Valle de Avoca, en Wicklow, Irlanda, se juntan los ríos Avonmore (que en irlandés quiere decir “río grande”) y Avonbeg (que en irlandés quiere decir “río pequeño”) formando un solo río que recibe a partir de este punto el nombre de Avoca (que en irlandés no sé lo que quiere decir pero que, puestos a suponer, quizá quiera decir “el río enorme que resulta de la unión del río grande con el río pequeño”, de donde podría deducirse –si esta traducción fuese cierta- la enorme capacidad de síntesis del idioma irlandés cuando de ríos se trata). El punto donde ambos ríos confluyen se conoce como “The Meeting of the Waters” y sirvió de título al poema de Sir Thomas Moore que os copio (y echándole mucho morro al asunto trataré de traducir) a continuación.

 

EL POEMA…

 

The Meeting of the Waters

 

There is not in this wide world a valley so sweet

As that vale in whose bosom the bright waters meet,

Oh! the last rays of feeling and life must depart

Ere the bloom of that valley shall fade from my heart.

 

Yet it was not that Nature had shed o'er the scene

Her purest of crystal and brightest of green

'Twas not her soft magic of streamlet or hill

Oh! no, it was something more exquisite still.

 

'Twas that friends, the beloved of my bosom were near

Who made every dear scene of enchantment more dear

And who felt that the best charms of nature improve

When we see them reflected from looks that we love.

 

Sweet Vale of Avoca! how calm could I rest,

In thy bosom of shade, with the friends I love best

Where the storms that we feel in this cold world should cease

And our hearts, like thy waters, be mingled in peace.

 

…LA ¿TRADUCCIÓN?... 

(o algo aproximado, poco más o menos, pero hecha, desde luego, con la mejor de las voluntades y una más que evidente falta de estro poético por mi parte)

 

Donde se juntan las aguas

 

No hay en el mundo un valle tan dulce,

Como el valle en cuyo seno se juntan las aguas brillantes;

Desaparecerá mi último aliento de vida,

Antes de que la belleza de ese valle se borre de mi corazón.

 

Pero no es porque la Naturaleza haya derramado allí

Su más puro cristal y su verde más brillante.

No es tampoco la suave magia de sus arroyos o colinas.

¡Oh, no! Es algo aún más exquisito.

 

Es el que mis amigos del alma estén cerca,

Lo que hace más querido este encantador lugar.

Y ellos son los que magnifican los encantos de la Naturaleza

Cuando los vemos reflejados en  nuestro amor.

 

¡Dulce Valle de Avoca! ¡Qué descanso encontraré

Bajo tu sombra, con los amigos que más quiero,

Cuando hayan cesado las tormentas que agitan este frío mundo,

Y  nuestros corazones, como tus aguas, se mezclen en paz!

 

…Y ALGO SOBRE SU  AUTOR

(traducido y resumido de la Wikipedia).

 


Nacido en Dublín el 28 de Mayo de 1779 y fallecido en Sloperton el 25 de febrero de 1852 fue un poeta romántico irlandés.

Estudió en el Trinity College de Dublín, y posteriormente estudió Derecho en el "Middle Temple" de Londres. Sin embargo, obtuvo la fama como poeta, traductor, actor, cantante y compositor de baladas populares. Su obra pronto se hizo inmensamente popular, incluyendo entre sus composiciones algunas que son consideradas entre las más populares melodías irlandesas: "The Harp That Once Through Tara’s Halls", "The Minstrel Boy", "Believe Me If All Those Endearing Young Charms", "The Meeting of the Waters" y muchas otras.

Moore fue bastante más que un compositor de baladas. En su juventud fue monje de una congregación católica durante más de 12 años, se licenció en Musicología, Teología y Filosofía y también ejerció como Profesor de Psicología. Tuvo gran éxito como personaje social en Londres, y en 1803 fue nombrado registrador del Almirantazgo Británico en Bermudas. Desde allí, viajó a Canadá y los Estados Unidos. Después de este viaje publicó su libro  “Epistles, Odes, and Other Poems”, en el que se incluye un canto dedicado a las históricas Cataratas Cohoes (titulado “Lines Written at the Cohos” (sic), or “Falls of the Mohawk River”), entre otros versos famosos.

Durante su estancia en Estados Unidos fue muy crítico con la esclavitud, la forma de gobierno del país y, particularmente, con su presidente Thomas Jefferson, a quien conoció a través del embajador británico. Una  situación curiosa tuvo lugar con ocasión de su presentación al Presidente Jefferson: cuando el presidente vio a Moore, cuya estatura era excepcionalmente pequeña, le confundió con un niño. (¿Tendría ello algo que ver con su declarada animadversión hacia el Presidente? Me pregunto…)

A su regreso a Inglaterra, en 1811, se casó con una actriz, Elizabeth "Bessy" Dyke, a quien conoció cuando ambos formaban parte de los Kilkenny Players, agrupación teatral formada tanto por actores y actrices profesionales como por destacados miembros de la sociedad irlandesa.

Debido a su particular gusto por el lujo y a pesar de llegar a poseer una gran fortuna, contrajo numerosas deudas, una situación que empeoró a causa de un grave desfalco cometido por John Goodrich, a quien había contratado para que le representase en las Bermudas. Moore fue responsable de las seis mil libras de las que su empleado se había apropiado ilegalmente, por cuyo motivo, en 1819 se vio obligado a abandonar Gran Bretaña estableciéndose en París hasta 1822, cuando por fin pudo saldar la deuda por completo.

Fue amigo personal y albacea literario de Lord Byron, publicando a la muerte de éste, una biografía titulada “Letters and Journals of Lord Byron, with Notices of his Life”.  Sin embargo, cediendo a la petición de la familia, que las consideraba “peligrosamente deshonestas”, con la ayuda de su editor y amigo John Murray,  también editor y amigo personal de Byron, destruyó las memorias del famoso autor.

Al final de su vida, establecido en Sloperton Cottage en Bromham, (Wiltshire, Inglaterra), alcanzó fama y éxito como novelista, biógrafo y poeta.

Su vida estuvo marcada por la tragedia, incluyendo las muertes prematuras de sus cinco hijos y un ataque al corazón que lo dejó incapacitado para la interpretación escénica, actividad que era su preferida y en la que también alcanzó gran y merecida fama.

Thomas Moore es considerado el Poeta nacional irlandés y se le conmemora con una placa en la casa donde nació, y con una gran estatua de bronce cerca del Trinity College de Dublín.

 

Números musicales de la película

(letra y música compuestas por Meredith Willson)

 

I Ain’t Down Yet

Interpretada por Debbie Reynolds.

 

I’ll Never Say No

Interpretada por Harve Presnell y Debbie Reynolds.

 

Belly up to the Bar, Boys

Interpretada por Debbie Reynolds.

 

I’ll Never Say No

Interpretada por Harve Presnell.

 

Colorado My Home

Interpretada por Harve Presnell.

 

I’ll Never Say No

Interpretada por Debbie Reynolds.

 

He’s My Friend

Interpretada por Harve Presnell y otros.

 



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